Según nos cuentan en la película, debido a una maldición del jefe apache Gerónimo al morir, los muertos de los blancos se levantarán con ganas de cerebros. En este contexto, un par de vaqueros -unidos por una trifulca en el Saloon- terminan encarcelados por el malvado y corrupto Sheriff del pueblo. En los calabozos coinciden con un muerto viviente acusado de matar a su familia. Nuestra peculiar y simpática pareja protagonista logra escapar, sin embargo, el Sheriff (ya infectado por el zombi reo) pronto sale a su busca.
En el camino, la pareja es capturada por una atractiva india que precisamente es sobrina de Gerónimo. A pesar de la tensión, la india termina por confiar en ellos a medida que los zombis se van multiplicando durante el camino. En mitad de su huída del grupo de muertos vivientes liderados por el Sheriff, son hechos prisioneros por el ejército, que los lleva a un fuerte cercano a El Colorado. No obstante, la infección también se ha propagado allí y deberán deshacerse de los zombis militares.
El trío compuesto por los dos vaqueros y la india resiste como puede en el fuerte a los intentos de asesinarlos de la horda de muertos vivientes que ya los amenaza desde dentro y fuera de las instalaciones. Finalmente, nuestros dos vaqueros protagonistas son mordidos y serán infectados por la maldición, sin embargo, según se deja entrever, logran sanar del hechizo de la única manera posible: al comerse a la india, pariente de Gerónimo y autor de la brujería. La película termina con imágenes del primer zombi, el que mató a su familia y que estaba en la cárcel, desenterrando a su hija y encontrándose con su mujer para ser una familia feliz de no muertos.
"Wanted: Vivos o no muertos" es una película con muchos pretendidos (aunque no siempre logrados) momentos de humor que sin duda crea un ambiente distendido y cómico en la historia. El argumento se desenvuelve en pleno oeste, con sus pueblos y sus recreaciones bastante conseguidas, siendo siempre la películas de zombis con ambientación en el pasado muy agradecidas, aunque en esta ocasión con unas actuaciones de sus protagonistas bastante justitas.
En esta filmación los zombis, que hablan y razonan, también aportan su granito cómico. Es curioso, por ejemplo, que en este levantamiento provocado por la brujería, no se les destruye con un tiro en la cabeza, sino arrancándosela. La caracterización es buena, aunque algo irregular, y el desarrollo de la historia tiene cierto interés, aún siendo a veces demasiado lenta.
En definitiva, una comedia de zombis entretenida, con una ambientación y trama original, que intenta explotar los recursos de unir una película del oeste con otra de muertos vivientes protagonizada por una típica pareja de personajes cómicos y antagónicos. Una filmación recomendable, aunque indudablemente no esté a la altura de otras comedias del género como "Shaun of the dead" o "Zombieland".
Trailer (en inglés):
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