miércoles, 30 de octubre de 2013

(2003) Dead clowns

Dead clowns es una película de bajo presupuesto de producción estadounidense rodada en 2003, aunque también es fechada en 2004, donde los protagonistas son unos payasos que vuelven a la vida con ganas de sangre.

La historia nos sitúa en la ciudad de Port Emmett, un lugar con un oscuro pasado que está a punto de sufrir los efectos de un huracán. Según nos cuentan, hace cincuenta años el tren de un circo se precipitó hacia las aguas del lugar después de que el puente por donde pasaba se viniera abajo. El vagón donde viajaban los payasos nunca se recuperó por motivos logísticos y sobre todo, económicos, dejando para siempre enterrados en el lodo a estos anónimos payasos y quedando en el pueblo como su gran secreto vergonzoso que era mejor ocultar.

La película se centra sin demasiado detalle en varios habitantes del lugar aquella noche del huracán, esa misma noche en la que los payasos vuelven a la vida desde las profundidades para cobrarse venganza por el olvido y la deshonra que han sufrido. De esta forma, y como si fueran asesinos en serie, van apareciendo en las casas de nuestros desafotunados protagonistas con sus cuerpos podridos por el tiempo pero con sus ropajes extrañamente impolutos.

Uno tras otro los habitantes van cayendo en las garras de estos payasos zombis cabreados porque pasaron de ellos como de la mierda. En un determinado momento a uno de los protagonistas se le ocurre que si les rinde algún tipo de homenaje, los muertos cesarán su matanza. Y efectivamente funciona..., pero solo por un tiempo, ya que la lluvia del huracán hace que se borre el cartel de recuerdo y los payasos terminan el trabajo que habían comenzado.

"Dead clowns" es una película que deja bastante que desear en muchos aspectos, pero que sobre todo destaca por su inexistente guión, incapaz de dar un mínimo de sentido a la trama, de transmitir algo con los personajes o las situaciones... nada. Una narración totalmente plana y sin sentido que se basa exclusivamente en mostrar una serie de muertes gratuitas en forma de venganza y punto. Ni los personajes ni sus historias importan lo más mínimo aquí.

Dejando de lado los fallos e incoherencias del guión, también podemos resaltar que sus efectos especiales y su ambientación son bastante cutres, que los actores son aficionados y que lo único que prácticamente se puede salvar son algunas escenas gores, con un aspecto bastante artesanal, sobre todo en el último tramo de la filmación, el resto, todo bastante mejorable -bueno, el cartel tampoco está mal-.

Los muertos vivientes en esta ocasión aparecen con toda la cara deformada de formas varias pero con una caracterización que no siempre acaba de convencer. En un principio, estos payasos se comportan más como asesinos en plan "Viernes 13" cuchillos en mano, aunque poco a poco van pegando mordiscos hasta terminar dándose un festín de miembros amputados y vísceras.

En definitiva, una película que es un quiero y no puedo, con una buena idea en potencia transformada en un producto sin interés y que en ningún momento acaba de explotar el miedo popular a la figura de los payasos.  Muy poco recomendable.

Trailer (en inglés):


Valoración:

(2012) The doomsday book

The doomsday book es una película producida en 2012 en Corea del Sur que nos narra tres historias distintas con un nexo en común: el fin del mundo. Ha sido dirigida por dos directores (Kim Jee-woon y Yim Pil-sung) y su título original es "Inryu myeongmang bogoseo", algo así como "Informe sobre la destrucción de la humanidad".

La primera historia apocalítptica se denomina "Un mundo feliz" (A brave new world) y es la única donde podemos disfrutar de los infectados y muertos vivientes. Seok-woo es un joven investigador que se queda solo en casa después de que sus padres y su hermana se vayan de viaje aprovechando los días de fiesta. El joven queda al cuidado del hogar y aprovecha la oportunidad para salir a cenar con una chica para probar suerte. Después de limpiar su casa se dirige hacia la cita. En esos momentos podemos comprobar como la basura orgánica de Seok-woo, especialmente una manzana podrida, es reciclada como alimento para animales que posteriormente servirán de cena en su propia cita, cerrándose así la cadena.

Poco después de la comida, el joven comienza a sentirse raro, enfermizo y especialmente violento. Lo mismo le pasa al poco tiempo a su pretendida y a gran parte de la población local que se ve contaminada por carne animal contaminada por un extraño virus que no para de mutar. Las personas parecen enloquecer y comienzan a atacar a otras personas y poco después, a comérselas. Las noticias -mayormente en tono satírico- recoge las medidas de las autoridades para contener una infección que termina por superarles.

Al tiempo la ciudad termina gobernada por los violentos infectados deambulando de un lugar a otro, y la televisión confirma que también las víctimas de estos infectados que creían muertas están volviendo a la vida. En este caos, Seok-woo, ya totalmente fuera de sí, destroza su casa y ataca a su familia cuando vuelven del viaje. Posteriormente se encontrará por las calles con la joven con la que tuvo la cita aunque ya las prioridades vitales de ambos han cambiado mucho desde la última vez que se vieron...

De forma más resumida, comentaremos brevemente las otras dos historias. La segunda se denomina "La criatura celestial" (The heavenly creature), un relato tremendamente largo e insulso sobre la trascendencia existencialista de un robot al que le consideran la reencarnación de Buda (imagen del cartel) y al que ahora sus propios creadores pretenden eliminar por el peligro que supone. La tercera y última narración se llama "Feliz cumpleaños" (Happy birthday) y en ella se detalla una paranoica historia sobre la desaparición de la especie humana con OVNIS, meteoritos, bolas de billas y agujeros negros de por medio.

Centrándonos en nuestro relato de interés, "Un mundo feliz", es bajo mi perspectiva la mejor historia de las tres que componen la película. Salpicada con algo de humor y una evidente crítica al capitalismo consumista en el que vivimos en la actualidad, nos narra de una forma relativamente realista como puede darse una infección, tratada como una epidemia más, hasta que termina fuera de control y con humanos comiéndose a otros humanos.

Aunque no se trata de forma demasiado profunda este tema, podemos suponer que la mayoría son, en principio, infectados, aunque a medida que avanza el tiempo la situación empeora y se menciona explícitamente que también los fallecidos por consecuencia de ataques de infectados se están levantando. La caracterización no es mala del todo, con ojos blancos, venas en la cara y la boca siempre chorreando sangre o fluidos indeterminados.

En general, una película con ciertos elementos originales, recomendable para los amantes de los relatos asiáticos, aunque demasiado larga para ser historias "cortas" y con muchos momentos lentos e intrascendentes, sobre todo en la segunda historia, que por otro lado, es la más relevante y conocida. Irregular filmación con un correcto segmento dedicado al apocalipsis con muertos vivientes.

Trailer (en coreano):


Valoración:

jueves, 24 de octubre de 2013

(2009) The zombie farm

The zombie farm es una película producida en Estados Unidos en 2009, con marcado acento latino y que intenta recuperar los zombis clásicos del vudú. También es conocida como "Macumba" y en español como "La granja de los zombies".

Pilar es una reportera que pretende denunciar la violencia machista en la comunidad de origen latino de los Estados Unidos. Viendo el rechazo de sus jefes ante este tipo de reportajes de índole social, decide realizar un documental sobre Roque, un peculiar santero de la zona que aparenta ser todo un timador charlatán. Cuando Pilar comienza a conocerlo se da cuenta de que tiene más fondo del que se había imaginado.

Un día, una mujer maltratada acude desesperada a la consulta de Roque para intentar calmar a su violento marido. El santero lamenta no poder ayudarle y la mujer termina acudiendo a otra hechicera -esta vez, parece que de verdad- que le ofrece un brebaje para que se lo dé al marido con la promesa de que todos sus problemas se acabarán. Al poco tiempo, la mujer maltratada vuelve a la consulta de Roque y le dice que ha matado a su marido, que ese mejunje de la hechicera era un veneno y que se lo ha cargado. Pero hay algo más, y es que desde su muerte ella cree que el cadáver del maltratador le ha estado persiguiendo... pronto sus sospechas se harán realidad con la aparición del marido zombi con mala ostia todavía que cuando estaba vivo.

Roque y la mujer maltratada logran huir del zombi asesino. Posteriormente, y con la ayuda de Pilar, investigarán sobre la misteriosa hechicera que parece tener en su casa todo un ejército de muertos vivientes a su disposición controlándolos mediante la magia negra y el vudú. Nuestra pareja protagonista asiste a un traslado de muertos vivientes desde la casa de la santera hasta una granja donde los tiene trabajando en sus cultivos. Roque y Pilar -que viven el típico affaire amoroso- son capturados por la malvada hechicera que alimenta a sus zombis con carne humana y que utiliza su poción para matar a las víctimas y revivirlas a sus órdenes.

La santera engaña a la mujer maltratada para que vaya también a la granja, aunque finalmente será el propio maltratador quien se revele contra su malvada ama y los zombis volverán a caer tras su muerte librando de un trágico final a Pilar y Roque quien precisamente había podido revertir un poco antes los efectos de la poción zombi.

"The zombie farm" es una irregular película marcada por una lenta y aburrida media hora inicial, un desarrollo entretenido y un final francamente mejorable. El comienzo llega a ser desesperante, con muchas escenas irrelevantes y diálogos intrascendentes, tardando mucho tiempo en arrancar y sin saber muy bien a dónde se dirige. Con la llegada de los primeros muertos vivientes el interés se incrementa, desprendiéndose incluso en algunos momentos de la constante atmósfera a telefilm que desprende, pero que no termina de sacar todo el partido argumental a los muertos vivientes.

Las actuaciones no son nada del otro mundo, algunos protagonistas no hay por donde salvarlos y otros hacen lo que pueden. Destaca como curiosidad que la práctica totalidad de actores son latinos y utilizan frecuentemente expresiones en español, aunque obviamente la filmación está grabada en inglés. En general no es una producción mal grabada, lo peor es su desarrollo y la multitud de situaciones totalmente inconexas con la historia principal.

Respecto a los zombis son algo desconcertantes. En principio parecen totalmente del vudú, intentando asesinar con sus manos y bajo las órdenes de la sacerdotisa. No obstante, veremos posteriormente a un "ganado" de muertos vivientes cuyo principal interés es comer carne humana y que nos recuerdan a los zombis romerianos, siendo este un aspecto bastante irregular e incoherente en general. En esta ocasión no se les puede parar ni con disparos en la cabeza.

En definitiva, una película con un título algo que engañoso que puede resultar entretenida por momentos pero cuyo planteamiento y desarrollo no acaba de convencer. Un intento de volver a los muertos revividos por el vudú un tanto errático con un claro protagonismo de la comunidad latina estadounidense y que puede servir, entre pitos y flautas, para visibilizar el problema de la violencia machista. Recomendada para los más fanáticos del cine de zombis pero solo a partir de su segundo tercio.

Trailer (en inglés):


Valoración:

martes, 22 de octubre de 2013

(1962) Historias de Terror

Historias de Terror es una película estadounidense fragmentada en tres historias de terror basadas en los relatos del escritor Edgan Allan Poe. Su título original es "Tales of Terror" y también es conocida como "Cuentos de Terror".

Como hacemos en estos casos, nos centraremos en la historia donde aparece, en esta ocasión, un único muerto viviente que se denomina "La verdad del caso del señor Valdemar".

El señor Valdemar (Vincent Price) es un aristócrata que se encuentra en la fase terminal de su enfermedad. Para aliviar el dolor que le produce, utiliza los servicios de un oscuro hipnotizador (Basil Rathbone) que lo pone en trance para que se evada de su desmejorado cuerpo. Esta terapia alternativa la hace el señor Valdemar con las reticencias de su joven mujer y su apuesto médico personal.

El hipnotizador le ha pedido a su paciente que le deje hipnotizarlo en el momento justo anterior a su muerte y el señor Valdemar accede gustoso, a pesar de las nuevas negativas de su mujer y su médico. Precisamente el moribundo habla con su esposa para pedirle que una vez que él muera se case con el doctor para que no esté sola en la vida.

Cuando llega el momento de su muerte, el hipnotizador procede dejándolo en trance, de tal forma que el señor Valdemar muere en la cama pero su mente, su conciencia, parecen atrapadas entre dos mundos. Durante semanas el cuerpo del fallecido ha continuado en su cama, sometida su voluntad en la ultratumba por el malvado hipnotizador. Un día este personaje intenta forzar a la viuda de Valdemar para que se case con él, una situación que provoca que el cadáver del hombre abra los ojos, se levante de la cama y asesine al hipnotizador, quedando después totalmente descompuesto. Finalmente, el doctor rescata a la mujer de Valdemar y todos felices.

Las otras dos historias que componen la filmación se titulan "Morella" y "El gato negro". La primera es sobre un fantasma que vuelve para vengarse de su hija a la que culpa de su muerte y la segunda sobre un borracho que empareda a su mujer y a su amante y que va perdiendo la cabeza una vez cometido el asesinato. Personalmente creo que la mejor es la segunda, "El gato negro", mientras que "Morella" es a mi entender la más flojita de las tres.

Respecto a "La verdad del caso del señor Valdemar" es sin duda la más terrorífica, con unas buenas actuaciones -tremendamente estereotipadas, eso sí- y una historia interesante con tintes clásicos que nos ofrece en su fase final los únicos instantes con un muerto viviente de toda la producción. Como aspecto negativo, y compartido con las otras historias, cabe destacar el machismo que supura, muy "de su época".

En general, "Historias de terror" es una película interesante, con una atrayente ambientación victoriana y la participación de relevantes actores. Tres historias más o menos bien llevadas que, sin entrar a valorar su parecido con la obra original de Poe, pueden hacer pasar un rato agradable a los aficionados a los relatos de terror. La última historia es donde podemos disfrutar de un muerto que vuelve a la vida para ejecutar una venganza y cuya conciencia parecía estar en el limbo, curiosa, sin duda y recomendable de visionar.

Trailer (en inglés):


Valoración:

domingo, 20 de octubre de 2013

(2009) La masacre de Town Creek

La masacre de Town Creek, originalmente conocida como "Blood Creek" o simplemente "Town Creek", es una película estadounidense filmada en 2009 donde se vuelven a relacionar los nazis con el levantamiento de los muertos.

La historia comienza en 1936. Una familia alemana asentada en una granja en el corazón de Estados Unidos recibe una carta pidiéndoles colaboración en una investigación. La familia acepta con algunas dudas básicamente por el dinero que les ofrecían. Al poco tiempo llega un extraño profesor, un investigador nazi que pretende profundizar en los poderes ocultos de una runa vikinga encontrada por estos granjeros germanos en su propiedad, una enorme piedra que pronto sabremos que dará al investigador el poder de revivir a los muertos.

Saltamos en el tiempo hasta la actualidad. Evan es un médico que cuida de su anciano padre y de los hijos de su hermano mayor, Victor, un veterano de guerra que fue secuestrado hace dos años. De forma repentina Victor vuelve una noche, despierta a Evan y le pide que le acompañe para ejecutar la venganza a sus captores, desplazándose los dos hermanos armados hasta la granja de la familia alemana del comienzo, en Town Creek.

Una vez en la finca, podemos comprobar que la familia está prácticamente igual a pesar de que han pasado más de setenta años desde las primeras imágenes. Victor quiere vengarse de ellos, ha estado secuestrado en su terreno y nunca hicieron nada. Matan al hijo mayor del matrimonio, atan a la madre y a la hija adolescente y esperan a que regrese el padre del pueblo. Cuando llega, los hermanos intentan matarle pero no lo consiguen, en ese momento sale de su escondite, en el sótano del granero, el investigador nazi, el malo malote que ha conseguido la inmortalidad para él y la familia, además de increíbles poderes después de todos estos años practicando ciencias ocultas con la runa mágica.

Según nos cuentan, la familia ha podido tener controlado en la finca al investigador con antiguas señales vikingas y alimentándolo con sangre humana de gente que secuestraban. Este hombre se ha convertido en un ser sobrenatural que busca su tercer ojo (en la frente) durante un eclipse lunar, porque a partir de ese momento su poder aumentará y ya será imparable.

Los hermanos y la familia se refugian en la casa, adornada con esas señales que impiden que entre. Para conseguir llegar hasta ellos, el nazi mata a un caballo y posteriormente lo revive susurrando unas palabras. El caballo zombi no logra su objetivo, así que revive al hijo muerto para que realice su voluntad de entrar en la casa y  matarlos. El hijo mata a su padre, que también es revivido por el investigador, aunque nuestros hermanos protagonistas logran abatirlos.

Finalmente, Evan y Victor, ayudados por la hija adolescente y la madre de la granja, logran ejecutar con éxito su plan para destruir al nazi envenenándolo con su propia sangre utilizando huesos de sus antepasados. Cuando el investigador muere, los zombis que había revivido vuelven a caer y las mujeres de la familia también fallecen al dejar de ser inmortales. Las últimas imágenes de la filmación nos dejan ver a Victor fascinado con la posibilidad de ser inmortal y a Evan que se va en busca de otros nazis similares en diversas granjas del país.

"La masacre de Town Creek" es una película con una estética atrayente pero con una historia bastante flojita que se acaba cayendo por su propio peso. El comienzo es ciertamente esperanzador, con una ambientación trabajada y una historia con posibilidades. No obstante, el interés va decayendo en su desarrollo, sobre todo por las incoherencias del guión y algunos detalles ridículos, hasta llegar a un final plano y bastante mejorable.

Como decía la película está bien grabada en general, los actores son convincentes e incluso tiene algún salpicón de gore, sin embargo la historia tiene poca continuidad, se hace un abuso de escenas intrascendentes y los efectos especiales son irregulares, con algunos montajes buenos (como el caballo zombi) pero otros realmente malos, además, el investigador da muy poquito miedo, e incluso todo lo contrario, corriendo de acá para allá y quitándose pellejos cada dos por tres.

En esta ocasión parece que volvemos a un concepto de zombi preromeriano, de los que se levantan uno a uno por la utilización de magia y sirve a la voluntad del hechicero que los revivió. En la filmación aparecen tres personas, un caballo y un perro zombis. Su comportamiento no está basado en morder para alimentarse, sino que utilizan cuchillos e incluso hablan, siempre con los ojos totalmente blancos y sirviendo a su amo nazi.

En definitiva, una película que vuelve a utilizar el sugerente argumento de los nazis como catalizador para el levantamiento de los muertos, entretenida por momentos, pero que personalmente no me ha acabado de convencer. Lograda atmósfera visual pero deficiente guión, sin duda, podría haber dado bastante más de sí.

Película completa:


Valoración:

viernes, 11 de octubre de 2013

(1973) Messiah of evil

Messiah of evil, también conocida como "Dead people", es una película producida en Estados Unidos en el año 1973. En español suele ser traducida como "Mesías del mal".

La filmación comienza en lo que parece ser un psiquiátrico, donde una voz nos advierte de que todo lo que vivió es real y que no está loca. Esta voz es la de nuestra protagonista, Arletty, una joven que -ya centrándonos en la historia- se dirige hacia el costero pueblo de Point Dune, en California, donde reside su padre, ya que ha recibido varias cartas preocupantes y no responde a sus llamadas.

Arletty llega a la casa de su padre que se dedica a la pintura, pero está vacía, ni rastro de su progenitor. La joven va hasta la galería de arte de aquel extraño pueblo pero nada saben de él, parece que nunca hubiera estado allí a pesar de ser su residencia desde hace tiempo. En su búsqueda, nuestra protagonista conoce a un aristócrata que es coleccionista de cuadros y al que le interesa especialmente las oscuras leyendas de los pueblos, y precisamente aquel, tenía para aburrir. Es entonces cuando el borracho del lugar les habla de la "luna de sangre" y alerta a la muchacha de que debe matar y quemar a su padre si lo termina encontrando.

La joven sigue indagando entre los documentos de su padre, donde encuentra un diario que relata su sufrimiento ante lo que parece ser una enfermedad que lo estaba consumiendo. A todo esto llega a la casa del padre el aristócrata y sus dos novias, ya que se han sido expulsados del motel donde se encontraban. A una de las novias no le hace nada de gracia la intromisión de Arletty en su relación, por lo que decide irse de allí en plena noche. Esta mujer descubre a los siniestros habitantes del pueblo comiendo carne cruda en el supermercado y termina entrando ella misma en su menú.

Tras una larga noche donde las hogueras en la playa volvieron a encenderse, las autoridades del pueblo pretenden engañar a Arletty diciéndole que han encontrado el cuerpo muerto de su padre, pero ella no se lo cree y continúa investigando. A todo esto, la otra novia del aristócrata decide ir sola al cine para desperjarse un poco y... efectivamente, también es devorada por los misteriosos ciudadanos a los que, por cierto, les suele sangrar los ojos y los oídos.

Paradójicamente, ahora es Arletty la que comienza a tener los síntomas que su padre describía en su diario y que parecen apuntar a que era un muerto viviente. De repente su padre aparece en la casa. Le cuenta que hace 100 años de la llegada allí del "Forastero oscuro", la persona que comenzó todo aquello y que prometió que volvería del mar justamente ese día. Le dice que ese pueblo está infectado y que debe irse, que él ya se ha convertido en uno de ellos y que necesita comer carne humana. Arletty prende fuego al padre y consigue huir de aquel infierno aunque como veíamos al comienzo, será internada en un psiquiátrico desde donde espera que aquellas criaturas se terminen extendiendo.

"Messiah of evil" es una película poco conocida, una rareza oscura y onírica de la que destaca en gran medida su argumento, que seguro inspiró bastantes producciones posteriores. Por ejemplo, viéndola me vino a la memoria la española "La noche de las gaviotas", grabada tan solo dos años después (1975) y sobre todo la fantástica "Muertos y enterrados" de 1981. No obstante, se debe reconocer, quizá por esos desarrollos posteriores, que la trama podría haber dado bastante más de sí.

El ritmo de la narración es algo que no termina de convencer, sobre todo al comienzo que es quizá demasiado lento y en el final, algo atropellado. La ambientación es buena, mayormente inquietante, destacando la casa del padre de la protagonista, llena de originales pinturas. La estética es, como se nos advierte nada más comenzar, una recreación de una pesadilla.

Sobre los habitantes del pueblo, todo parece apuntar a que, efectivamente, se tratan de muertos vivientes, sin embargo, con unas características poco habituales. Lo más desconcertante son sus hábitos nocturnos para asesinar, algo que ha hecho que algunos se planteen si no se tratan realmente de vampiros. No obstante, tanto la apariencia, como la forma de alimentarse de carne humana no dejan de recordar a "La noche de los muertos vivientes" grabada cuatro años atrás. De todas formas, aunque las evidencias parecen inclinarse a que son zombis, no se termina de profundizar en la infección en cuestión.

En definitiva, una película con una estética original y una buena ambientación, pero a la que le cuesta arrancar y que parece no terminar de explotar. Un sugerente argumento -que por momentos se pierde en los detalles- y un conseguido ambiente de tensión psicodélica son los pros de una filmación a la que le falta  continuidad, personajes más carismáticos y más situaciones movidas. A pesar de todo, y contextualizándola en su época, puede llegar a ser recomendable para comprender películas posteriores.

Película completa:


Valoración:

domingo, 6 de octubre de 2013

(2006) The quick and the undead

The quick and the undead es una película estadounidense de bajo presupuesto grabada en 2006 que, al contrario de lo que podría sugerir su título y su cartel, no está basada en el viejo oeste americano.

Nos situamos en un mundo postapocalíptico a lo "Mad Max" donde hace 80 años comenzó una infección a nivel mundial de un virus que mata y revive a los cadáveres en forma de zombis come carne. En este hostil contexto la historia se centrará en Ryn, un cazarrecompensas que se dedica a matar a zombis a cambio del dinero que le ofrece el gobierno por hacerlo. Nuestro protagonista es una especie de ridículo Clint Eastwood que quiere dar la sensación de ser el más duro del baile.

Ryn es traicionado por su antigua banda de cazadores que le roban su último botín (dedos de muertos como muestra de las piezas cazadas), es disparado y luego para colmo también mordido por un zombi. ¿Ha muerto nuestro protagonista a los pocos minutos?... Pues no, que nadie se preocupe porque este vaquero futurista es tan duro que incluso es inmune a la infección zombi porque según explica es "como el sarampión" y él ya la pasó una vez -¿¿??-... pero además tampoco le ocurre nada tras el disparo en el estómago y haber perdido varios litros de sangre. Este tío es así, se levanta como si tal cosa y comienza a pensar cómo se va a vengar de los  forajidos que lo traicionaron.

La banda, que obviamente cree que Ryn está muerto -aunque de forma muy extraña no lo remataron-, se dirige hacia una nueva ciudad para continuar amasando dinero cazando muertos vivientes. Ryn los sigue con la ayuda del mismo colaborador que lo vendió la primera vez y que lo conduce hasta el destino de sus enemigos. Pero antes de cobrarse la venganza, también resulta que el jefe de la banda es tan malo que incluso está propagando la infección para después matar a los zombis que él mismo provoca.

Como era de esperar, Ryn ejecuta su venganza contra los que le traicionaron, vive alguna escenita de amor con la única mujer de la banda, con la que parece que tenía un rollito y después de que todos menos él fueran mordidos e infectados, le entra un bajón en el que parece que se va a suicidiar aunque finalmente le pega un tiro a su amada zombi y se fuma un purito tan tranquilamente.

"The quick and the undead" es una película bastante mejorable, donde se baraja una idea que podría resultar de interés, pero con un guión y una ambientación que dejan muchísimo que desear. Lo cierto es que tanto la presentación de la filmación como los primeros minutos son realmente esperanzadores, pareciendo una grabación cuidada y con un aspecto original. No obstante, nada más arrancar la película empieza a dar la sensación de que le falta algo y al poco la decepción se materializa de forma irremediable.

La trama es francamente simple y aburrida, convirtiéndose en una de esas películas que, a pesar de no durar demasiado, es todo un mérito aguantar hasta las escenas finales. De hecho, solo aparecen seis actores y la mayoría del tiempo lo único que hacen es andar por el bosque reproduciendo un guión por momentos absurdo. Los actores no son pésimos, aunque nada convincentes, sobre todo el personaje protagonista que suele dar más pena que miedo.

Sin duda, lo único que se puede salvar son algunas escenas gores que distraen un poco en medio de tanto sinsentido. Respecto a la caracterización de los zombis es muy irregular, existiendo muertos con un maquillaje más que aceptable pero otros ridículamente pintados o con evidentes máscaras. Por último, se puede destacar que el rol de los zombis en la historia es más bien de relleno, piezas de caza que incluso le son de ayuda a nuestro protagonista para ejecutar su venganza.

En definitiva, una película poco recomendable de la que solo se puede salvar los momentos de tripas y sangre. Un decepcionante guión con multitud "perlas" incoherentes, unas actuaciones poco creíbles, una ambientación muy pobre y un desarrollo lento y aburrido marcan esta falsa película de zombis en el oeste.

Trailer:


Valoración:

viernes, 4 de octubre de 2013

(1989) Ánimas

Ánimas es una película estadounidense filmada en 1989, cuyo título original es "Night Life", también conocida como "Grave misdemeanors" y protagonizada por Scott Grimes (el niño de Critters).

Archie es un adolescente pringadete que está obligado a trabajar como ayudante en la funeraria de su tío Flanders para conseguir el dinero necesario que le dé la posibilidad de ir a la universidad y escapar del pueblo de mala muerte donde vive. Muy pronto descubriremos que es atosigado por un par de compañeros de instituto malotes, que con sus respectivas novias superpopulares, le hacen la vida imposible a nuestro desgraciado protagonista.

Después de la última broma pesada de estos cabroncetes, muertos de la fueraria incluídos, tienen un fatal accidente de tráfico -algo esperable viendo como conducían-, resultando muertos tanto ellos como sus novias y donde se vio involucrado un camión de residuos tóxicos. Cuando se entera Flanders, llama inmediatamente a Archie para que le eche una mano en la funeraria a pesar de que poco antes le había despedido e incluso amenazado con arruinarle la vida.

Los cuatro muertos son trasladados a la morgue y el tío Flanders encarga a Archie que durante la noche los embalsame y los prepare para la ceremonia del día siguiente. Esa misma noche y en mitad de una gran tormenta, un rayo cae en la funeraria y coge de lleno a los cuatro cadáveres que allí estaban. Al poco tiempo los jóvenes muertos vuelven a la vida, convertidos, eso sí, en todos unos asesinos en serie... Efectivamente, los mismos que puteaban a Archie en vida ahora lo hacen también en muerte...

Nuestro protagonista logra escapar de la funeraria y emprende una larga huída donde se reúne con una joven amiga suya con la que mantendrá los típicos roceteos amorosos de este tipo de películas. Nuestra pareja lo tiene muy negro, pues estos zombis no solo tienen unos brutales instintos asesinos, sino que también saben conducir y piensan detenidamente los planes que seguirán. Ni la policía ni el intento de Archie para carcinarlos parece que puedan acaban con estos muertos vivientes, aunque finalmente logran deshacerse de ellos uno tras otro tras una accidentada persecución.

"Ánimas", o mejor dicho "Night Life", es una típica película ochentera que puede ser más apreciada por lo que representa que por lo que realmente ofrece. La primera parte de la historia es tremendamente lenta, sin mucho que ofrecer, aunque con el levantamiento de los muertos gana bastante, siendo la persecución final lo más destacado sin lugar a duda, sobre todo por sus falsos finales que levantan algo la expectación.

El guión es bastante justo, introduciendo algo de humor, de tensión y de acción, pero sin terminar de convencer completamente en ningún momento. Las actuaciones la verdad es que no son de lo peor de la película, aunque en algunos tramos el protagonista da la sensación de no acabar de encajar demasiado en el papel.

Respecto a los zombis, los únicos que aparecen son las dos parejas de jóvenes muertos, ya que en esta ocasión ni muerden ni tampoco contagian. Es más, se podría decir que son personas prácticamente normales, algo torpes, eso sí, pero que razonan y se mueven con una facilidad pasmosa. Como tampoco son controlados por nadie, creo que es normal que quede en el aire la pregunta del por qué asesinan, del por qué de esas ansias de matar gratuitamente.

En definitiva, una más de las decenas de películas ochenteras que mezclan muertos vivientes y adolescentes con las hormonas disparatadas. Una filmación con más sombras que luces y que nos ofrece muy poco o nada original, pero que, sin embargo, podría llegar a entretener a los más fanáticos, sobre todo por su movido último tramo.

Trailer (en inglés):


Valoración:

martes, 1 de octubre de 2013

(2004) Corpses

Corpses, denominada en español "Cuerpos", es una película de zombis grabada en Estados Unidos en 2004.

La historia comienza con unos muertos vivientes robando algunos productos químicos y jugando un rato al baseball. Pronto conoceremos que detrás de ellos se encuentra Fred, un perdedor en toda regla que es el encargado de la funeraria de aquel pequeño pueblo. Este hombre ha descubierto un suero verde fluorescente, totalmente a lo "Re-Animator", que al inyectárselo a los muertos logra que revivan pero solo durante una hora. Fred, sin dinero, abandonado por su mujer y a punto de ser embargado, decide utilizar este descubrimiento para alcanzar sus ansias de poder y fama.

Como contrapunto al malvado Fred tenemos a su ayudante en la funeraria, Jerry, un guapo adolescente que mantiene una relación con la hija del Capitán Winston, casado actualmente con la ex mujer de Fred y que es el jefe local de policía, calzonazos, y el archienemigo de Fred... efectivamente, todo un lío. Bueno, pues Jerry se encuentra a medio camino entre las cosas extrañas que ocurren en la funeraria y la tormentosa relación familiar de su novia.

A todo esto Fred continúa levantando muertos y los envía a robar, asesinar y sobornar a todo el que puede con el fin de conseguir quedarse con su funeraria y alcanzar la fama mundial con su descubrimiento. Fred secuestra a su ex mujer y captura a Jerry y su novia, que estaban acercándose más de lo debido. En este momento ya hay más de una decena de muertos yendo y viniendo torpemente de acá para allá.

Finalmente, el capitán Winston ejecuta una ridícula venganza en la funeraria, matando a los zombis después de que éstos se revelaran contra su creador, y salvando a su mujer que también terminará fiambre tras haberle inyectado el suero reanimador en vida. Jerry y su novia logran revivir con la última inyección y vivirán felices como zombis en la funeraria ayudando a otros muertos.

"Corpses" es una película flojita y bastante tontorrona. Con esto me refiero a que es una filmación de buen rollo, simplona, sin maldad y con un humor políticamente correcto que pocas veces logra su objetivo de hacer reír. La historia no genera demasiado interés, su desarrollo es bastante artificial y su guión totalmente plano. Tampoco se puede apreciar originalidad en sus planteamientos, a saber: una funeraria, inyecciones reanimadoras, zombis y una historia de amor juvenil... todo demasiado trillado.

Otro tema es el de los efectos especiales, muy mejorables y con algunos momentos míticos como el zombi amputado con su brazo clarísimamente debajo de su camiseta o las caras verdes a medio pintar de algunos de los muertos vivientes. No obstante, y a pesar de que tampoco los actores están demasiado refinados, es una producción que en algunos momentos puede parecer simpática y para los menos, incluso interesante.

Los zombis en esta grabación son un grupito de muertos muy reconocibles porque siempre son los mismos. Su comportamiento es bastante tontorrón, como si fueran bobos, pero con una buena comprensión y mucha lógica. Al principio no pueden hablar, aunque parece que con el paso del tiempo aprenden espectacularmente hasta poder ser maravillosos actores. Lo más destacable, la cuestión de que el suero tiene efectos temporales muy limitados, por lo que suelen recordar a auténticos yonquis.

En definitiva, una comedia de zombis que intenta mantenerse fiel al género y recuperar a los zombis romerianos, pero que termina siendo un poca ñoña y absurda. Sin duda más aspectos negativos que positivos en una película que puede entretener a los menos exigentes.

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