La historia nos transporta a un futuro no muy lejano donde no es extraño la existencia de zombis, que incluso parece que con los años van evolucionando, obteniendo mayor capacidad de comunicación y raciocinio.
Nuestro protagonista, Otto, es un zombie con crisis de identidad y será él mismo el que nos narre gran parte de la historia. Después de ir deambulando sin rumbo fijo, llega hasta la ciudad de Berlín. Una vez allí y como necesitaba el dinero para alquilar una habitación y dejar la calle -ya que corría peligro de que acabaran con él las pandillas callejeras- se presenta al casting para una película sobre los zombis que acabará protagonizando, se trata de "Up with Dead People" y realmente lo que vemos en la pantalla es una mezcla entre la película realizada y la propia experiencia real de Otto.
La película "Up with Dead People" es dirigida por una mujer excéntrica fascinada por la muerte que pretende cuya intención con la grabación es denunciar la sociedad consumista, capitalista e insostenible y la cultura dominante a través de los ojos de nuestro zombi protagonista.
En el peculiar contexto de una plaga de zombis gays en extensión, Otto comienza a recordar cosas de su vida anterior. No quiere comer carne humana y se pregunta por qué. Además es consciente de que está muerto y de que los vivos no le tratan nada bien. Poco a poco comienza a acordarse de un amigo con el que lo pasaba muy bien y del que estaba enamorado, de hecho, logra reencontrarse con él, pero parece que ese amigo ya lo ha olvidado.
Paralelamente, la película porno gay politica de la excéntrica directora termina con un levantamiento revolucionario, encabezados por el "Ché Guevara de los no muertos" como le llaman literalmente. Dicho levantamiento culminará con una orgia que nos mostrará diversas escenas de porno gay explícito.
Otto, parece que con el corazón roto, practica sexo con el actor de la película, y una vez terminado su trabajo, se marcha hacia el norte, lejos de los vivos.
"Otto; or Up with Dead People" es un largometraje muy experimental y algo extraño. Destacamos que parece tener la intención de abarcar muchos estilos y registros y ciertamente es muy ecléctica. De hecho, la película por momentos es aburrida y entretenida, realista y onírica, seria y cómica. Indudablemente, una apuesta innovadora con especial protagonismo del denominado "terror homosexual"
La historia dispone con momentos ciertamente desconcertantes, aunque la fotografía es bastante novedosa y atractiva. Como curiosidad destacamos, por ejemplo, que la novia de la directora siempre aparece como si estuviera en una grabación de los años 20.
En definitiva, una película de zombis muy poco habitual, con momentos bastante "undergrounds" que relata las experiencias de un muerto viviente inadaptado. Aunque llama la atención, no deja de ser muy lenta y absurda por momentos, con un mensaje político poco creíble y bastante contenido sexual explícito.
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