La acción se centra en un peculiar grupo de amigos. Uno de ellos es abducido por un OVNI donde un alienígena le practica una extraña operación que desemboca en su muerte y posterior reanimación como un zombi sediento de sangre. Según parece, el plan de unos malvados alienígenas que quieren conquistar el mundo es provocar una infección zombi que signifique el comienzo de la autodestrucción de la especie humana. De esta forma, se convierte en una original y peculiar trama donde el holocausto zombi es provocado por unos extraterrestres.
Los tres amigos restantes (un médico, un matemático y un luchador de "catch") le plantan cara a los zombis para lograr escapar con vida, aunque no lo tendrán fácil con unos zombis inteligentes, que hablan, juegan al póker y hacen malabares y que además son bastante cabroncetes.
El médico logra crear un remedio basado en una mezcla química para inyectárselo a los zombis y así destruir su organismo por dentro y matarlos. De esta forma, se lanzan a una loca y encarnizada lucha para intentar destruir todos los zombis que se encuentren en la casa donde están encerrados.
Al final, el FBI logra controlar la situación y se llevan al único amigo que ha logrado sobrevivir. Sin embargo, lo que no se espera es que realmente los alienígenas están compinchados con el propio FBI.
Reconocemos el intento de querer llevar el género zombi a tierras argentinas, una arriesgada apuesta que según parece no fue nada mal. Sin embargo, la película es demasiado espesita y asquerosilla, con una obsesión por los salivajos de colores diversos. También destacamos la caracterización de los zombis muy rara, peculiar y extremadamente heterogéna, con caras pintadas de colorines y cada uno a su bola.
La película también dispone de momentos cómicos algo aburdos, como la lucha a modo de "pressing catch" que se marca uno el protagonista luchador con un zombi.
En definitiva, un mejorable intento de película zombi, con algunos aspectos originales en la historia, pero con una estética totalmente amateur que únicamente referenciamos aquí por su valor simbólico en la historia del cine de zombis en el país argentino.
PD. Este trabajo es el primero de una saga, que no será comentada, compuesta además de esta primera parte por "Plaga zombie 2: Zona mutante" de 2001 y "Plaga zombie 3: Zona mutante - Revolución tóxica" de 2012.
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